Sobran maestros en españa

Los nuevos garantes de la cultura en españa

No sabemos si esa era la intención última del gobierno de españa y sus amos: la conferencia episcopal, pero pronto será una realidad. españa podrá ahorrarse el dineral que cuestan los profesores de enseñanza pública, esos inútiles. De hecho, y como bien deja traslucir el BOE cuando convierte el dogma católico en cultura, solo con los profesores de religión podrán evaluarse todas las asignaturas «importantes» que no distraen las sensibles mentes de los niños. Unos ejemplos:
Las Matemáticas se reducirán a lo realmente importante: el 1 que es el número de dios, el 3 que es dios con los colegas, el 7 y algún que otro número bíblico. Por otra parte se acabará con la tontería botellera de no poder sumar peras y manzanas; si un cadáver reciclado, un vejete con barbas y un palomo desflora vírgenes pueden ser sumados, nada impide a la iglesia reestructurar las matemáticas hasta adaptarlas al mismo dios, verdad suprema. Sobran entonces los matemáticos, quién mejor que los profesores de religión para introducir a los niños en la compleja matemática trinitaria.
La Lengua y la Literatura carecen ya de sentido alguno ¿Dónde podemos encontrar la mejor escritura conocida y con la mejor ortografía plasmada sino en la obra redactada por el mismo dios? ¿Dónde podemos encontrar una historia más completa que aquella escrita por el altísimo? Sobran entonces el resto de libros, pensamientos, ensayos y críticas. Los profesores de religión son muy capaces de evaluar dichas asignaturas. Los demás, esos incompetentes, son material sobrante.


La Física, la Química, la Paleontología, la Antropología, la Zoología; todas las ciencias que estudian la Evolución, el origen del Universo y de la Vida… todas ellas asignaturas inútiles y sin sentido. Pues ahora conoceremos por fin que todo lo creó dios de la nada. La Tierra volverá a ser el centro del universo real, no de ese Universo imaginario que han postulado científicos enfermos de narcisismo y capaces de poner en tela de juicio los actos del creador. Lo que debamos saber de adán y eva, lo que sea necesario conocer del jardín del edén y los conocimientos históricos relativos al diluvio universal podrán, y deberán, ser impartidos por profesores cualificados designados por el arzobispado y pagados a escote por todos y cada uno de los españoles (solo de los que pagamos).
Ahora que sabemos que solo dios nos da la felicidad. Ahora que nos serán impartidas sus sagradas leyes, qué sentido tiene una asignatura como la Filosofía. No necesitamos pensar, ni cuestionarnos, ni tener criterio. El buen católico, lo que españa necesita, es la docilidad del creyente, la visión amplia del que abraza la fe, el camarero temeroso de dios que no se equivoca en la suma de las consumiciones. Qué mejor profesor entonces que el de religión para alcanzar tal propósito.
Fuera asignaturas inútiles y falsas; fuera todo conocimiento impartido para confundir a las almas nobles de los niños; fuera todos los maestros que no abrazan la fe en Rouco y sus secuaces. Llega la hora para españa de que salgamos del aletargamiento que nos dio la Cultura y entremos, por fin, en el paraíso de la ignorancia más opaca. Gracias José Ignacio, sin criaturas como tú podríamos hasta ser europeos de mente; ahora, gracias a tu buen hacer, formaremos parte del mundo fundamentalista e integrista que tanto bien hace a países donde ha triunfado, Afganistán, por poner un ejemplo conocido.

Gracias José Ignacio Wert.
Gracias partido popular.
Gracias obispos.
Gracia papa paquito.

Ser ignorante no es delito, ni es pecado mentir (artículo de Manuel Saco)

Un articulo de obligada lectura escrito por Manuel Saco para eldiario.es

Una de las características más notables de la política es que no se necesitan habilidades ni conocimientos especializados para alcanzar el poder. Ni siquiera un miserable examen psicotécnico. Resulta inconcebible que un ignorante pueda estar al frente de un equipo de cirujanos en un trasplante de hígado, o que el estudio de la resistencia de materiales de un futuro puente colgante haya sido encargado a un albañil, o que el análisis de las perspectivas de comportamiento de la prima de riesgo se encomiende al vidente Rappel. Sin embargo la prosperidad de todo un país puede ponerse en manos de un incompetente con el único requisito de que haya sido elegido por mayoría, al igual que las asociaciones de padres de alumnos norteamericanos pueden exigir por mayoría simple (de simpleza) que se enseñe en la escuela a sus hijos la teoría del creacionismo que se opone a la teoría científica de la evolución de las especies. Es la verdad obtenida por mayoría. Esa es la esencia de la democracia.

El intrusismo profesional está condenado por ley, para defendernos de falsarios cuya incompetencia podría arruinar nuestras vidas. Pero el intrusismo político no, porque por definición, y a falta de una carrera universitaria al respecto, un político es un intruso al que no se le exige ningún conocimiento específico para el cargo que va a ocupar, pero al que, si aprueba en las urnas, le otorgamos el poder suficiente para, por ejemplo, definir nuestro sistema sanitario, la cobertura social de los parados, o las materias que han de estudiar nuestros hijos en las escuelas. Antes de ser elegido, el postulante asegura, ante el tribunal de los votantes, que atesora suficientes conocimientos como para solucionar el paro en cuarenta y cinco días, rebajar las listas de espera sanitarias a treinta, y dejar la prima de riesgo a niveles de ensueño. Y aunque a posteriori se demuestre que se trataba de un impostor, que políticamente no era cirujano, ni ingeniero, ni vidente, es prácticamente imposible llevarlo ante los tribunales, porque ser ignorante no es delito, y porque mentir no es pecado.

Si repasamos nuestro consejo de ministros, acabamos preguntándonos qué hemos hecho los españoles para merecer esto. Si aquello, más que un gobierno, no parece un altar, una capilla, una iglesia. Y, lo que es peor, comprobamos que, a falta de preparación más específica por parte de los allí congregados por Mariano, se confían las soluciones imposibles de la cosa pública a un dios uno y trino (¡me encanta eso de uno y trino!), sobre todo a uno de ellos, el tercero, el que hace de hijo, inmolado en la cruz, y a su madre todavía virgen después del parto, además de a una corte celestial de santos entre los que brilla el marqués San Josemaría Escrivá, el fundador de la secta secreta del Opus Dei.

Leer el artículo entero en este enlace

Lo que hace un hombre que no tiene ni palabra ni vergüenza…

El gran Wyoming siempre se encarga de simplificar las cosas para nombrarlas con sus palabras justas y medidas. Pone en su lugar a criminales como Wert, Rajoy, Mato y resto de delincuentes corruptos que manejan este país como si fuera su latifundio y que utilizan, para ello, tres pilares fundamentales: Corrupción, Mentira y Engaño.

Os dejo con su maravillosa aportación en el programa «Al rojo vivo»

En favor de la asignatura de religión

Yo era totalmente contrario a la asignatura de “Religión”, lo confieso. De hecho era un acérrimo defensor de la laicidad de los estados y del mantenimiento de las confesiones religiosas dentro del límite de sus templos y sufragada por el dinero de sus acólitos.

El tiempo y la realidad de espania me han hecho ver cuan equivocado era mi pensamiento: este país es católico por la gracia de unas leyes que regalan el cielo en Tierra a toda esa “curia negra” (no de ropaje ni de raza), y desde el beneplácito y la inacción de una población mayormente ignorante y estúpida, precisamente por no haber sido educados en la verdadera asignatura de “Religión”.

He recapacitado y he terminado por darme cuenta de lo bueno y necesario que será para nuestras generaciones futuras la “imposición” del catolicismo aunque sea “a sangre y fuego”. Y para argumentar el porqué del cambio que se ha producido en mí me remitiré a mi propia experiencia con dicha asignatura y en aquellos lejanos años en los que un enano sanguinario y dictador entraba en el templo bajo la protección del palio, como si de la misma Hostia se tratara.

Jamás le agradeceré lo suficiente a mis padres el hecho de que, con once años, me matricularan en “La Salle Congreso” y en la que cursé lo que entonces se llamaba Bachillerato y que duraba seis años. No hay agradecimientos suficientes pues allí aprendí la vida de Jesús, sus palabras, sus milagros y su pasión, muerte y resurrección. Y aprendí el valor y el peso del Pecado, su gran baza para con los niños. Y de entre todos ellos, que los hay a miles, el Pecado de la Carne, esa tentación natural y de especie que su dios nos impuso con la única intención de que ellos instauraran el miedo en nuestro interior.

No entraré en detalles de lo que representó para aquellos niños, yo entre ellos, el descubrimiento sexual. Baste saber que entramos en él de un modo sucio, soez, escondido, oscuro, asqueroso y fundamentado en el pecado y en eso que funciona tan bien en las sociedades fundamentalistas de: La pura y la Puta (pobres mujeres, culpables sin culpa alguna).

No entraré en detalles de lo que representó darse cuenta de cuan distintas era las enseñanzas de aquel pobre tipo llamado Jesús y las practicas de sus teóricos seguidores, mayormente enfermos sexuales gravísimos.

Pero en cambio conseguí lo que de otro modo me hubiera estado vedado: Conocer al enemigo. Conocerle desde dentro y saber cuan enfermos están y cuan hipócritas son. Aprendí sus mentiras, sus cuentos, su violencia para con los niños, su obsesión sexual, su miedo feroz a la Mujer, su pederastia (no conmigo pero sí con otros)… Y es así que gracias a esa asignatura de religión me convertí en el más ferviente anticatólico (y por extensión, antireligioso). Por esa razón la considero tan necesaria. Cuantos más anticatólicos consigan forjar con su locura, antes les echaremos al mar.

Gracias amigo Wert. Puede que te conviertas en el iniciador de la cruzada anti católica de espania.

Wert y la puerta de atrás del Vicente Calderón

España empata ante Francia. Leer la noticia

Al terminar el partido el señor Wert (ministro de Cultura, Educación, Deportes y toma de decisiones guais), en un arranque de modestia y monarquismo, salió a toda prisa por la puerta de atrás del Vicente Calderón.

Al ser abordado por nuestro enviado especial hizo unas breves declaraciones que reproducimos a continuación: “Que sepan todos que no me he ido porque me sintiera amenazado por la chusma. Yo sé lo que españa me quiere. Si he marchado de ese modo ha sido para no quitarle ningún protagonismo a su majestad, que ese si que la lleva jodida de unos años para acá entre familia, elefantes y republicanos.”

Tras ser preguntado por la sorpresa del resultado y la cantidad de lesiones ha comentado lo siguiente: “Está claro que habré de ir yo personalmente y tomar cartas en el asunto. Primero iré a españolizar a los franceses para que lesionen a menos jugadores del Real Madrid y lesionen a los de otros equipos. Después iré a españolizar a todos los catalanes infiltrados en la varonil y machorra selección española para que jueguen a ganar y no fallen penalties a drede. Qué se puede esperar sino de franceses y catalanes que hablan parecido y en una lengua que no entiende ningún cristiano”.

Ante estas declaraciones, un periodista americano del “daili sundai”, le ha preguntado si no consideraba exageradas esas palabras. Su respuesta ha sido contundente: “No. Eso es solo el principio. En breve me iré a españolizar al resto del mundo, desde el Tibet, que no sé donde cae, hasta Gallifa. Y no acabará ahí la cosa. La intención del PP, con el apoyo de la Única Iglesia Que Vale, es evangelizar al mundo entero y hasta a los países extranjeros si conseguimos la reelección.”

(Benito Camela para PutoParao Nius)