Pocas cosas pueden encontrarse hoy en día con una indecencia mayor que el trato que Orange ofrece a sus “clientes” (entrecomillado porque más parecemos lacayos).
No se vayan a pensar que lo digo por la porquería de producto que ofrecen, que no llega a unos mínimos decentes; ni piensen que es por su Servicio Técnico, infame, por no decir inexistente, pues apenas son capaces de resolver la más simple consulta técnica. Lo digo por lo que estoy viviendo en mis propias carnes y que forma parte de un sbmundo kafkiano. Les cuento:
Hace muchos años, ya ni recuerdo cuantos, contraté mi primera ADSL con una empresa que se llamaba “Ya.com” (tiempos felices pues estaba en manos de una empresa seria). Desde entonces he estado al día de pago, nunca he protestado por nada, ya que me basaba en aquello del: “Más vale malo conocido que bueno por conocer”, y he tragado con todas las ruedas de molino que me han echado encima las distintas empresas que fueron comprando la empresa original en la que confié.
Este mes de enero pasado, llevado también por la desfachatez de La Caixa, decidí cancelar mis cuentas con ella. No entraré en detalles de lo que me costó llevar esa acción a buen puerto, eso sería para escribir otra entrada en el blog. Una vez canceladas mis cuentas entré en la página de Orange, la Impresentable, y cambié la cuenta de domiciliación bancaria. Después di por terminadas mis tareas como cliente que desea vivir tranquilo. A partir de aquí viene lo bueno:
Miercoles 10/04/2013: Me llaman al teléfono y es un individuo de la empresa Orange, la Impresentable. Me explica que desde el mes de enero no se ha pagado ningún recibo…
Inciso necesario. Yo no sé los demás, pero en mi casa tenemos muchas cosas domiciliadas y yo no me dedico a mirar todos y cada uno de los pagos, con lo que no estoy al tanto de todos ellos; solo confío en el buen hacer de todas las partes. Por otro lado, Orange, la Impresentable, nos dice en su página, y pueden ver el pantallazo al final de la entrada, que si hay “””UN””” impago, mandan un correo avisando del hecho. Sí, aciertan, a mí nadie me mandó un correo.
… Ese mismo individuo me pide que para solucionar el problema y proceder al cobro le pase el número de mi tarjeta de crédito. Así, de pronto, como si nos hubiéramos vuelto locos. El tipo pretende que yo, sin conocerle de nada, sin saber a ciencia cierta desde dónde coño me llama, ponga en sus manos la posibilidad de expoliar ni menguada cuenta corriente.
Ante mi negativa me transmite las ingentes dificultades en las que me veré por mi mal proceder. Le cuento que me parece perfecto pero que me de un número de cuenta en la que abonar la deuda. Él me dice que me mandará un SMS al móvil en el que vienen explicados los pasos a seguir, tras ello me pregunta que cuándo voy a proceder al pago. “Pues en un par de días” le comento, él me amenaza sutilmente, después lo negará, con que debo pagar al día siguiente. Me enfado, le explico que llevo años pagando religiosamente y el problema no lo he generado yo sino la incompetencia de su empresa…
No nos extendamos más, quedamos en que pagaré el jueves, lo más tardar, y colgamos.
Miercoles 10/04/2013 (algo más tarde): Llega un SMS a mi móvil. El texto es el siguiente: 9001 orangeinforma: pagocajeroBBVAde XXX,XX €.Sigainstrucciones:Operarsinlibreta/Recibosytributos/Operaciónmanual/Sinavisodepago/Orangefijo.
Gracias.
Yo no sé a ustedes, lo que es a mí, una información como esa no me dice demasiado. ¿Dónde está la cuenta? ¿Qué quiere decir esa cadena de instrucciones? Pienso que será el modo de proceder desde su página. Error. Ellos, al igual que cualquier otra empresa de ese tipo, te permiten darte de alta en tres segundo con dos pasos; pero no se te ocurra intentar cualquier otro trámite; para eso han contratado a expertos egiptólogos capaces de esconder lo más natural del mundo en zonas inescrutables de algún disco duro. También aciertan, con esas instrucciones no se podía hacer nada. Pensé que tal vez era algún subterfugio que tenían montado en el propio banco. Error. Tampoco ahí podía hacer nada ¿Qué hice entonces? Pensé que al día siguiente lo intentaría yendo a una oficina o ellos se dignarían a llamarme (descarto llamarles yo porque mis principios éticos me impiden llamar a un 902 cuya misión es enriquecer el doble a la operadora de telefonía y a quien tiene el número contratado y arruinar algo más al desgraciado que llama.
Jueves 11/04/2013: Yo no había conseguido nada y ellos no me llamaron. Al final de la tarde me cortaron la linea ADSL.
Viernes 12/04/2013: Mi pareja consigue ir a un BBVA y liquidar nuestra deuda. La ADSL sigue cortada.
Sábado 13/04/2013: La línea ADSL sigue cortada. Nos vamos a la zona wifi de la Biblioteca y allí descubrimos en su página que “la ADSL será activada pasadas 48 horas del pago del adeudo”. Perfecto. No tenemos la culpa de nada y somos gilipollas, pero nos esperaremos al domingo, a media mañana, que nos activarán la ADSL y meor nos olvidamos del asunto que lo importante es ser feliz.
Domingo 14/04/2013: La ADSL sigue desconectada.
Lunes 15/04/2013: Estoy escribiendo esto y ahora son las 11:20 (otras 24 horas más desde que se realizó el pago) y la ADSL sigue desconectada.
Lunes 15/04/2013: A media tarde ya tengo la ADSL conectada. Para llegar aquí mi pareja ha tenido que mandar un correo “duro” a los indecentes de Orange. Imagino que de no ser por eso seguiría sin conexión.
Lunes 15/04/2013: A media tarde ya me he puesto en contacto con otro operador de ADSL para huir lo antes posible de estos impresentables.
Esta ha sido la cronología de los hechos. Por el hecho de cancelar una cuenta en una entidad financiera llevo casi cinco días sin ADSL. Para quien no lo sepa, gran parte de mi trabajo consiste en estudiar a través de la Red, escribir en la Red, leer artículos de la Red, contactar con gente por la Red… Lo que viene a ser “una gran putada”.
¿Desde este momento dedicaré los esfuerzos que pueda para que el máximo de gente se dé de baja o no caiga en las garras de esos impresentables. Para esto último necesito del favor de mis lectores para que intenten compartir esta entrada en todos los lugares que puedan. Si lo hacen les estaré eternamente agradecido.